Adobo Casero
Ingredientes:
Costilla, lomo, sal y aceite de oliva.
Preparación
Este plato lo preparamos en un barreño mondonguero .
En la base del barreño, colocaremos un plato boca abajo, para que se escurra todo el jugo de la carne.
Cortamos la costilla a trocitos,y el lomo en trozos de 1 cm.
Salamos y colocamos en este orden: La costilla y el lomo.
Lo dejamos 4 o 5 días con la sal.
En una sartén honda con el aceite de oliva, si es posible de la cosecha del año, freímos los trozos por este orden: primero el lomo y después la costilla.
Dejamos enfriar todo el día a la serena y lo guardamos en una tinaja barnizada. Cubrimos con aceite de oliva.
Este adobo, si esta bien preparado se mantiene durante un año.
Historia
¿ Os acordáis de este tipo de conserva ? No hace tanto tiempo , de que las gentes de los pueblos conservaban la costumbre de engordar un cerdo . Durante todo el año se le alimentaba a base de salvado, grano y verduras de la huerta. Y cuando llegaba el invierno con sus rigurosos fríos toda la familia esperaba ansiosa el día de la matanza del cerdo.
Para esas gentes ese día era una fiesta, y un motivo para reunirse, comer , cantar y pasarlo en grande.
Así las mujeres preparaban todos los útiles : barreños, trapos, maquina de moler la carne, las especies ( pimienta blanca, negra, pimentón dulce, picante, la canela, nuez moscada...).
Llegado el día de la matanza se encendía u gran fuego en el corral, donde se calentaba agua, que serviría para la limpieza del animal después del sacrificio.
Una vez degollado se procedía a cortar la diferentes partes del animal: el lomo, los perniles, los espaldares y los témpanos. Los hombres con canastas los iban depositando en callizos en el desván..
Antiguamente se acostumbraba a buscar una mondonguera para dirigir todo lo que desarrollaba en el mondongo , que normalmente eran mujeres de edad con una gran experiencia.
Mientras las mujeres lavaban los menudos ( budillos, panza... ) Los hombres repelaban la carne para hacer los chorizos y longanizas.
La longaniza se hacia de la carne más noble. Todos los embutidos eran de carne molida y preparadas con las distintas especies.Eran embutidas con la maquina de embutir y atadas posteriormente con hilo.
Para finalizar una costumbre muy entrañable en el Matarraña era el reparto de un plato con carne del cerdo a las amistades y especialmente a la gente más pobre del pueblo.
Espero que os haya gustado esta pequeña descripción de esta antigua costumbre.